“Mientras personas sordas habiten la tierra, permanecerán las señas…” —George, Veditz, Preservation of Sign Language [La preservación de la lengua de señas], 1913
En 1880, la asociación nacional de los sordos (NAD) fue establecido por líderes sordos quienes creyeron que la comunidad sorda de los Estados Unidos tenían el derecho de usar la lengua de señas, de congregar para tratar de temas importantes para ellos, y de tener sus intereses representados en el nivel nacional. Esas creencias se mantienen hoy, con la lengua de señas de los EE.UU. (ASL) como un valor fundamental.
La NAD reafirma su posición que la adquisición del lenguaje desde el nacimiento es un derecho humano de cada persona, y que los bebés y niños sordos deben tener la oportunidad de adquirir y desarrollar dominio de la ASL lo más pronto posible. Esta posición también está alineada con la postura de la federación mundial de los sordos y de las naciones unidas sobre los derechos humanos, la cual incluye la aceptación de las lenguas de señas.
La ASL es una lengua
ASL es la lengua de señas de la comunidad sorda de los Estados Unidos de América. Igual que los lenguajes hablados, escritos y los de señas del mundo entero, la ASL se conforme a los principios lingüísticos (e.g., la semántica, la sintáctica, la morfología, la fonología, y la pragmática). La estructura lingüística de la ASL es complejo y viso-espacial. Se distingue del inglés lo cual es un idioma linear, sequential, y basado en los procesos auditivos.
Como cualquiera otra lengua, se domina la ASL al nivel de los nativo hablantes por la exposición y la interacción desde los años tiernos. El aprendizaje de la ASL como un otro idioma también puede empezar en cualquier momento y continuar por la vida entera.
La ASL y el desarrollo temprano
Los años tiernos de un/a niño/a son los más críticos de la adquisición del lenguaje. Es el periodo en que se crea la fundación del desarrollo cognoscitivo y de la alfabetización. Los bebés nacen con una capacidad innata para adquirir lenguas accesibles e usadas por sus familiares y cuidadores. La competencia lingüística es fundamental para el desarrollo cognoscitivo, social, emocional, y psicológica. La NAD toma la postura de que la ASL es una lengua plenamente accesible y visual, por lo tanto debe ser ofrecida a cada bebe sordo/a además de tecnologías asistivas que puedan permitir los bebés sordos aprovechar de la/s lengua/s habladas por sus familiares y cuidadores.
La NAD apoya maximizar el dominio lingüístico para los bebés sordos a través de la implementación de un método bilingüe; es decir, incorporar la adquisición temprano y el aprendizaje de la ASL y del inglés. Además, la NAD está firmemente comprometida a asegurar que los padres de los bebés y niños recientemente identificados como sordos reciben información acertada sobre los beneficios de adquirir y desarrollar dominio en los dos idiomas.
La ASL en la casa y la escuela
Preparar los niños sordos lograr la fluidez lingüística óptima en la ASL y el inglés les facilitan participar en discursos de adulto en una manera significativa en el futuro, llevándolo a cabo como miembros productivos de la sociedad de los EE.UU. con la participación y la contribución plena.
La NAD anima los padres de los bebés y niños sordos aprender de los beneficios del método bilingüe (con la ASL y el inglés) y el rico patrimonio de la comunidad sorda de los EE.UU. También la NAD anima a sus afiliadas y miembros a dar la bienvenida a los niños/as sordos/as y sus familiares a la comunidad sorda, a trabajar con aquellas familias en conocer mejor las vidas y los éxitos de personas sordas, a apoyarles en aprender la ASL, y a tornarse como un recurso y fuente de apoyo para ellos.
Los programas educativos que brindan servicios a los estudiantes sordos por toda la nación están cada vez más adoptando los métodos bilingües para educar a los niños sordos. Estos métodos están basados en los principios lingüísticos y las prácticas semejantes a otros idiomas del mundo, los cuales promueven el aprendizaje de más de un idioma lo más pronto que sea posible. Las competencias lingüísticas y culturales contribuyen al desarrollo saludable de la identidad y autoestima para los/as niños/as sordos/as, incluso fomentan la participación en las comunidades de los sordos y de los oyentes.
Los programas que brindan servicios a los/as niños/as sordos/as y sus familias deben proveer oportunidades de sumergirse en la ASL para las familias con niños y bebés recientemente identificados como sordos. Específicamente, la postura de la NAD es que aquellos programas deben incluir las interacciones y los discursos con miembros de la comunidad sorda de los EE.UU. los quienes tengan dominio de la ASL, incluso los padres de niños/as sordos/as. Los profesionales educativos de la intervención temprana, del preescolar, la primaria, y la secundaria deben también poseer las competencias necesarias de la ASL y del inglés.
La NAD reitera su postura la cual es que la adquisición del lenguaje desde el nacimiento es un derecho humano de cada persona, y que los bebés y niños sordos deben de tener esta oportunidad de adquirir y desarrollar el dominio de la lengua de señas de los EE.UU. (ASL) lo más pronto que posible.
Aprobado en enero de 2008 por la junta directiva de la NAD.